F. J. DosilNeurosciences and History 2013;1(4):154-161
Descripción
Tipo de artículo: ORIGINAL
AUTOR
F. J. Dosil
Instituto de Investigaciones Históricas. Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. Michoacán. México.
RESUMEN
La teoría neuronal de Cajal tuvo una temprana y entusiasta acogida en México gracias a su discípulo vallisoletano Tomás Gutiérrez Perrín, que residió en este país, desde 1908, como profesor de Histología en la Universidad Nacional. Después de la etapa convulsiva de la Revolución mexicana, con el fin de seguir profundizando en las ense- ñanzas del Nobel, se invitó a dos notables colaboradores suyos, Francisco Tello y Pío del Río-Hortega, para que impartieran sendos seminarios y varios médicos mexicanos realizaron estancias en laboratorios españoles. Tras la Guerra Civil española, el arribo a México de diversos integrantes de la Escuela cajaliana (como Dionisio Nieto, Isaac Costero y Gonzalo Rodríguez Lafora) permitió que ésta echara raíces en este país, especialmente en el Laboratorio de Estudios Médicos y Biológicos. Además, estos médicos desterrados actuaron como nodos de una densa red que favoreció el notable desarrollo de la neurociencia mexicana, amparada en parte en las enseñanzas de Cajal.
PALABRAS CLAVE
Santiago Ramón y Cajal, México, Tomás Gutiérrez Perrín, exilio, neurociencias, Laboratorio de Estudios Médicos y Biológicos.
Neurosciences and History 2013; 1(4):154-161